Peter y El Callo Plantal

Extracto sacado del libro: Mitología del Origen de la Piedra Pome - Propiedades curativas en callos.

Nos trasladamos a una época remota, en un reino llamado Callupulis, existía una persona que cambiaría el destino de todo el pueblo. Peter, era una persona habitante del reino que realizaba tareas de mantenimiento en el palacio real. Aceitaba el portón levadizo, rasqueteaba el musgo de las paredes, libraba la fosa de aquellos desperdicios que dejaban los habitantes, habidos de encontrar un lugar urgente donde dejar alguna necesidad. Peter caminaba mucho todo el día, incluso había realizado varias perforaciones en sus sandalias para airear sus pies (este invento ha ido evolucionando y hoy en día lo conocemos como zapatillas con colchón de aire). Esto provocó que empezarán a aparecer en la planta de sus pies durezas ásperas que picaban y dolían. Ya cansado de probar remedios caseros como aceite de ombú ó aguarras, decidió visitar a su amigo y doctor Manotas. El Dr. Manotas había revisado estás dolencias en el pueblo, pero no lograba encontrar la cura, había denominado a este problema Mal de Callupulis ó Callo (utilizando la abreviatura). Los casos más comunes que había detectado eran: callos en las palmas de las manos (adolescentes, se desconocía la razón), callos en el trasero (repartidores de agua que andaban el sulky, sentados durante 18 horas sobre un tronco de árbol), callo en los dedos pulgar y mayor (lo padecían el rey y la reina de tanto chasquear los dedos para dar órdenes), callo de panza (padecido por las personas que iban a recoger agua del aljibe, de tanto apoyarse contra el borde del mismo) y este nuevo caso de Peter. En el pueblo no se hablaba de otra cosa que de esta dolencia, los que la padecían, vivían frotándose unos contra otros, callo contra callo, para aliviarse el malestar mutuamente. Entonces podíamos ver a dos tipos rudos del pueblo como Macizo (Callo de Panza) y Rasposar (Callo de trasero), aliviarse por horas, tanto es así que terminaron viviendo en la misma cabaña. El doctor Manotas decidió encomendar la misión de descubrir la cura a Peter, quien se montó en un sulky, decidido a encontrar un reino donde estuviera el antídoto. Cabalgó durante días, hasta que llegó a un reino, en su cartel de entrada decía: "Welcome to Pome". Comenzó a recorrer el pueblo, hasta encontrar al Dr. Pedregullo, médico del pueblo, quien le informó que el también tenía casos, pero lo más curioso era que ninguno se hallaba en la zona de los pies. Peter decidió ir a darse una ducha al Río Rasposo, el cual tenía debajo piedras muy porosas. Luego de la ducha Peter notó un gran alivio en sus pies, habían desaparecido las durezas, le había quedado la planta del pié como a una modelo luego de aplicarse una crema embecelledora. "Todo gracias a la piedra del río", pensó Peter, entonces casó masa y cortafierro, cargó grandes cantidades y se dirigió a su reino. Con una de esas piedras, le hicieron un monumento al pie izquierdo de Peter. Habiéndose hallado el antídoto, el pueblo estaba salvado y Peter fue considerado un héroe, y lo ascendieron, pasó a limpiar el segundo piso del palacio. Los únicos que no quisieron probar la cura fueron Macizo y Rasposar, que siguieron probando su técnica doméstica, alegando que aliviaba mucho el sufrimiento. Y vivieron felices y comieron perdices (bah!!! el que siempre se comía la perdiz era Rasposar).